El conflicto sin fin parece que tendrá una tregua durante los Juegos Olímpicos. La constante lucha entre los trabajadores del metro y Transport for London (TfL) que ha provocado numerosas huelgas en el último año parece que no repercutirá en la competición. Después de duras negociaciones, el organismo público ha ofrecido un extra de 850 libras a cada trabajador para que cubra las jornadas extras que requerirán tamaño evento.
El RMT, el sindicato que representa a cerca de 10.000 de los 18.000 trabajadores, parece dispuesto a aceptar. El secretario general de la asociación, Bob Crow, que ya había rechazo una oferta de 500 libras/trabajador anteriormente, anotó: «Es evidente que, pasar de no ofrecer nada a la última oferta de 850 libras es un gran cambio por parte de TfL. La oferta será ahora considerada antes de dar una respuesta formal».
El año pasado el sindicato logró un nuevo convenio de cuatro años que estableció sueldos de más de 50.000 libras anuales por 35 horas semanales y ocho semanas de vacaciones. Ese pacto, eso sí, se quiso cambiar poco después de ser firmado, razón de las continuas protestas. Los sindicatos ya han llegado a acuerdos similares con la amplía mayoría de empresas de transporte del país.