Tal y cómo informa hoy el diario The Guardian, durante la final de los 100 metros lisos de los Juegos Olímpicos de Londres 2012 tan sólo 29.000 asientos de los 80.000 que posee el Olympic Stadium estarán ocupados por el público local. La cifra representa tan sólo un 36% del total, un porcentaje que el organismo organizador, el LOCOG admitió el fin de semana después de semanas de mirar a otra parte.
Según admitió el propio LOCOG, la amplía mayoría de las entradas han sido designadas a directivos federaciones, sponsors, medios de comunicación, los llamados ‘grupos con prioridad en el acceso’ y espectadores captados en el extranjero, éstos dos últimos a precio bastante más caros. De las entradas disponibles para el evento central de los Juegos, 21.000 ya se han agotado y las 8.000 restantes saldrán a la venta en abril.
Un portavoz del LOCOG anotó: “Realmente no hay 80.000 asientos para poner a eventos. Restando los compromisos hay 61.000 plazas y la mitad se han puesto a la venta para la población del Reino Unido. La otra mitad han sido adquiridas por grupos de clientes preferenciales, entre los que también se encuentran aficionados al deportes de todos los países que estarán presentes en la cita”
La medida ya ha sido altamente crítica. El político liberaldemocrata, Lady Doocey, anotó ayer al diario inglés: «Serán unos Juegos para ricos, nopara todos». «Este secretismo obsesivo [acerca de la asignación de entradas] hace que te preguntes lo que ocultan”, añadió. El presidente del LOCOG, Sebastian Coe, prometió el año pasado que el 75% de las entradas irían al público local. Hace meses ya rebajó esa cifra hasta el 50%.