El pasado fin de semana el diario británico Sunday Times publicó que comités olímpicos nacionales y revendedores autorizados de entradas que representan a 54 países habían violado reglas en el proceso de venta de Londres 2012. Vendían entradas a precios abusivos a clientes que lo podían pagar. Y, ahí, no antes, empezó la lucha contra la corrupción en el proceso.
Ayer la policía británica informó que está investigando unos 30 sitios de internet no autorizados que vendieron ilegalmente entradas para los Juegos Olímpicos de Londres de este año, y advirtió a los aficionados sobre la posibilidad de ser estafados si las compran. “Ahora que se han la mayoría de las entradas, el público debe estar seguro de dónde las ha sacado», declaró Nick Downing, comisiario de Scotland Yard.
La policía británica dijo que había desactivado dos webs y que había acusado de fraude y blanqueo de dinero a un hombre de 44 años. El proceso de venta de entradas ha sido el asunto más polémico para los organizadores de Londres 2012. La demanda para muchos de los eventos superó la oferta, generando quejas sobre el modo en que los tickets fueron asignados, el costo y cuestiones técnicas en la reserva.La policía británica investiga la venta ilegal de entradas