Serbia llegaba a cuartos de final como cuarto clasificado de su grupo y, sin embargo, se meten en la final y lucharán por el oro contra los Estados Unidos, que vencieron en la otra semifinal a España. Y es que así son los equipos balcánicos, aparecen en los momentos claves y hacen lo que tienen que hacer justo cuando se les pide.
Australia llegaba con mucha fe de meterse en su primera final olímpica. Habían arrasado a Lituania en los cuartos de final y habían hecho una muy buena primera fase, incluyendo una victoria clara sobre la selección de Serbia. Pero una cosa es un partido de una fase de grupos y otra bien distinta un partido para meterse en una final olímpica.
Serbia pasó de ser un equipo que encajó nada menos que 95 puntos en ese partido ante Australia a sólo conceder cinco puntos durante el primer cuarto. La cosa para los aussies no mejoró de cara al segundo cuarto, donde sólo sumaron nueve puntos más. Los 14 puntos a favor con los que se fue Australia al descanso fueron el peor registro negativo en las últimas cuatro décadas de Juegos Olímpicos.
Y Serbia, que sí había tenido acierto en ataque, ya había encarrilado el partido a su favor. Durante la segunda mitad, la intensidad defensiva que mostraron los balcánicos ya no fue la misma, pero su acierto en ataque les permitió seguir teniendo ventaja suficiente como para no pasar ningún apuro. El base Teodosic y sus 22 puntos guiaron al equipo balcánico a la victoria final por 61 – 87.
Así que ya tenemos, Serbia – Estados Unidos, que se jugará este domingo. Antes de la final, como siempre, se jugará el partido por el bronce, con España peleando ante una Australia que seguro que ha salido muy tocada de este encuentro tras esta humillante derrota.